lunes, 28 de enero de 2013

Éstas son las diez lecciones de Steve Jobs para no olvidar

Apple, bajo la dirección de su fundador, Steve Jobs, se caracterizó por tener la capacidad de ver el mundo no como es, sino como debería ser, se encargó de redefinir el juego y compitió por ser la mejor en su nicho de mercado.


¿En qué medida puede adaptar a su vida las lecciones que dejó Jobs?

1. Ame todo aquello a lo que se dedica (su compañía, sus colaboradores, sus productos)

El fundador de Apple no podría haberse dedicado a otra cosa que a la firma de la manzana mordida. Tras abandonar por un tiempo la compañía, Jobs retornó para comprometerse a recuperar el control de la misma, cuando ésta se encontraba en bancarrota.
Todos tienen malos empleos en algún momento de su vida.
Según informó El Observador, para saber si está en el camino correcto, hágase las siguientes preguntas: ¿Estoy en el trabajo adecuado? ¿He encontrado la compañía adecuada? ¿Es este el conjunto de gente con la que quiero laborar? ¿Con este trabajo puedo aspirar a tener una carrera satisfactoria?
Si es así, genial. Si no, recuerde que las cosas cambian rápido y que está en el derecho de cambiar de ruta ahora mismo.

2. No tolere personas poco comprometidas alrededor suyo

Jobs hizo el gran trabajo de no permitir la proliferación de personas poco comprometidas en su empresa.
Además de no contribuir en las organizaciones, este tipo de trabajadores suele contagiar a los demás de su mala energía.
Sepa con quiénes debe y puede contar para alcanzar los objetivos trazados.

3. No puede hacer todo usted mismo

El CEO de Apple aprendió, a lo largo de su trayectoria, a dirigir de manera más eficiente a las personas.
Él entendió que no podía hacerse cargo de todo, al menos si deseaba que su trabajo tuviera éxito en escala masiva.
Los profesionales deben darse la oportunidad de triunfar, pero también deben aprender a fracasar, no solamente ser títeres de su propia voluntad.
En otras palabras, usted tiene que aprender a ser un gran líder, si quiere que sus ideas y trabajo duro tengan un impacto alrededor suyo.

4. Para vender una idea, producto o servicio, póngase en los zapatos de la otra persona

Si se tuviera que elegir algo especial de Apple, se debería reconocer que la firma de la manzana - al mando de Jobs -, más que cualquier otra empresa, siempre fue la mejor en imaginar un nuevo producto que nunca podría haberse soñado de antemano.
A pesar de ello, dicho producto parecía natural cuando llegaba a manos de miles de usuarios. A eso se denomina empatía y capacidad de ver el mundo no como es, sino como debería ser.

5. Ser el mejor en su nicho de mercado, pero no ser tan exclusivo, al punto que la mayoría no pueda experimentarlo

Durante su primera etapa en Apple, Jobs produjo una tecnología increíble, pero costaba demasiado dinero para la mayoría de la gente, señaló El Observador.
La tecnología era hermosa. Y sin embargo, Microsoft siguió dominando la mayor parte del mercado, ya que era menos costoso y lo suficientemente bueno. Cuando Steve retornó a la firma de la manzana, realmente se lo tomó muy a pecho.
El iPod, iPhone y iPad eran completamente nuevos y emocionantes. La gente esperaba que el nuevo iPad costara más de u$s1.000.
Pero cuando se supo que costaría casi la mitad del precio estimado, los usuarios estaban conmocionados. Usted puede tener las mejores ideas, pero para triunfar en un nicho de mercado también es necesario ponerse enfrente de la gente.

6. No se trata de vencer a la competencia en su juego. Usted redefina el juego

Apple creó el próximo "walkman" en el iPod, que obligó a los usuarios a pagar por música.
Antes del iPhone, los teléfonos inteligentes más importantes tenían teclados físicos como BlackBerry. Es decir, Apple llegó con algo totalmente diferente, dijo El Observador.
Piense diferente para crear un nuevo juego.

7. La importancia de la salud

Desde un inicio, Jobs no trató su enfermedad como debería haberlo hecho, se refugió en métodos naturistas que no le resultaron eficaces.
Cuando por fin decidió seguir el consejo de sus doctores, había pasado demasiado tiempo para salvarlo.

8. Nunca se duerma en sus laureles

Apple atravesó una situación realmente difícil durante unos 10 años. Y una vez que llegó a la cima sus competidores parecía implosionar, como Research In Motion (RIMM), Motorola, Sony y HTC.
Al llegar el éxito, la mayoría de directores generales y altos directivos se da un tiempo para posar para las portadas de revistas. Apple no se enfocó en eso.
Si el mundo lo adora, no quite el pie del acelerador.

9. No es solamente el paquete, también la presentación

Steve Jobs fue casi mítico en torno a cómo podía hacer una presentación.
Si bien debe preocuparse en tener un producto sólido, también busque crear algún plus.

10. ¿Está haciendo el trabajo que estaría orgulloso de mostrar a sus amigos y familiares?

Luego de que la firma de la manzana fuera cuestionada por Apple Maps, hubo una notable consecuencia en la salida de ciertas personas.
La regla de oro: ¿está haciendo un trabajo que estaría orgulloso de mostrar a sus amigos y familiares más exigentes?

iprofesional.com

lunes, 21 de enero de 2013

¿Qué dice tu escritorio de ti?

Según los objetos dispuestos en el espacio laboral es posible conocer la personalidad de su ocupante. Descubre qué expresa el tuyo.


Observa tu escritorio. ¿Está lleno de papeles sin leer? ‘Está adornado con fotos familiares? ¿Tienes juguetes que motivan tu creatividad? La forma en que organizas y decoras tu escritorio revela una sorprendente cantidad de información acerca de quién eres. 

En la oficina, arreglamos los espacios para comunicar nuestras actitudes, metas y valores. Como dueño de un negocio, los escritorios de tus empleados pueden ayudarte a entenderlos y a motivarlos más efectivamente. “La gente quiere darse a conocer”, afirma Sam Gosling, psicólogo y profesor de la Universidad de Texas. “Eres una persona más saludable, feliz y productiva si los demás te ven como realmente eres”.

Ahora, observa los escritorios de tus empleados. ¿Cómo luce el espacio? ¿Qué objetos personales tienen? “Es importante buscar temas”, señala Gosling. Enfócate en los objetos que parecen constantes y permanentes. 

Te presentamos algunas cosas fáciles de encontrar. Úsalas para entender tu personalidad y la de tu equipo: 

1. Un escritorio ordenado dice: Eres confiable y puntual
Las personas que tienen escritorios ordenados suelen ser más confiables, orientados a la acción y tener bien planeado su horario para terminar el trabajo a tiempo. “Cuando entro en un espacio, busco primero por un calendario”, dice Gosling, puesto que este elemento, si está usado, es otra señal de que se trata de una persona responsable. 

Tener un escritorio desordenado no es malo (la gente creativa suele tenerlo así), pero otros podrían juzgarte incorrectamente. “Cuando alguien ve una oficina desastrosa suele pensar que quien la ocupa es alguien desagradable, aunque no necesariamente sea cierto”, afirma Gosling. “Mi conclusión es que el desorden es desagradable de ver, por lo que puede asumirse que la persona es una desconsiderada”. 

2. Objetos poco comunes dicen: Eres creativo y estás abierto a nuevas experiencias
Las personas que tienen sobre su escritorio piezas artísticas inusuales o que acomodan sus objetos de forma singular tienden ser abiertos a las nuevas ideas y experiencias, y por lo general son creativos. “Si entras a un espacio y piensas, ‘nunca he visto esto’, es probable que la persona que ocupa la oficina sea muy abierta”, dice Gosling. 

Las compañías innovadoras, como las startups de tecnología, tienden atraer a gente creativa y a impulsar a sus empleados a mostrar su personalidad. Por ejemplo, Etsy le da a cada empleado $100 dólares de crédito para decorar sus escritorios, lo que lleva a un extraño display de robots, peluches de pulpos, máquinas de escribir vintage y arte.  

3. Posters y mensajes motivacionales dicen: Eres neurótico
Las personas que llenan sus escritorios con frases motivacionales suelen ser más neuróticas que las demás. “Este tipo de frases son una forma psicológica de tratar de mantener a la gente en buen estado emocional”, afirma Gosling. “Sirven para calmar la ansiedad”. 

Si tienes posters motivacionales, no te preocupes de que estén mandando un mensaje erróneo. La gente neurótica muchas veces es muy exitosa en el ambiente laboral y las frases que escogen representan sus valores. 

4. Un espacio invitador dice: Eres extrovertido
Las personas que tienen oficinas invitadoras (con la puerta abierta, sillas confortables y un tarro de dulces) tienden a ser muy sociales. Al crear un espacio que da la bienvenida, le muestran a las demás personas que son alcanzables y por lo general tienen más visitas que los introvertidos. 

La sociabilidad puede pavimentar el camino hacia ascensos y nuevas oportunidades, por lo que los tímidos pueden ayudar a sus carreras incluyendo en sus oficinas toques invitadores. “Las personas pueden aprender a ejercitar ese lado”, dice Gosling. 

Por Nadia Goodman

lunes, 14 de enero de 2013

¿Qué se necesita hoy para ser un buen jefe?


Los líderes de hoy entrenan, guían, apoyan, y capacitan a los demás para lograr las metas y objetivos mutuamente acordados. 

El contexto dinámico en el que estamos insertos, como individuos integrantes de una organización, cambia permanentemente, y las nuevas reglas del mercado prefieren líderes a administradores. Hoy sin duda es el valor de la gente el que hace la diferencia, y la gente accede a su máximo desarrollo profesional y personal al encontrarse con un auténtico guía.

“El mensaje empieza por uno mismo”

Nuestras experiencias van dando forma a nuestros valores y conductas. En el liderazgo esto no podía ser de otra manera. Las creencias que nos motivan como líderes, son las mismas que nos determinan como personas. Cuanta más auténtica sea esa relación, mayores serán la fuerza de nuestro liderazgo y el efecto sobre el ambiente que dirigimos. Podríamos decir que el principal propósito del líder de hoy, no es ni más ni menos, que la creación de líderes que continúen en el tiempo esa filosofía de equipo, que lleva a las compañías a diferenciarse sostenidamente en el tiempo.

“Uno es lo que comunica”

Seguramente no alcance con ser un buen director técnico, o entrenador. También son importantes los resultados. Saber mostrarlos, en línea ascendente y descendente, será de mucha ayuda para poder trabajar en un entorno de suficiente tranquilidad. Uno de los principales problemas que afrontan las compañías en estos últimos años, es la ansiedad por la concreción de objetivos, por la obtención de resultados. Un buen líder debe entender esta dinámica y estar preparado para manejar las presiones del entorno y no dejar que éstas afecten a su equipo. Problemas como stress funcional, ansiedad crónica, ataques de pánico, y diversas somatizaciones corporales, son males que hoy afectan a un creciente del grupo de trabajadores. El jefe de hoy gana la lealtad y el respeto de su gente porque la cuida, y la hace sentir bien en un ambiente de continuo  desarrollo, no sólo profesional sino también personal.

“Las personas hacen más cuando se sienten importantes”

La mayor causa individual de fracaso de ejecutivos y gerentes recién promovidos, es la incapacidad de formar equipos y asociaciones efectivas en todos los niveles dentro y fuera de la organización. Que una persona responda o no a una tarea, objetivo o función depende, en la mayoría de los casos, más a una cuestión psicológica que intelectual. La motivación juega un papel definitorio en este sentido, ya que es la aguja que regula el grado de compromiso del colaborador con el equipo, con la tarea, y con el líder.

Un buen jefe debe aprender a interpretar los códigos personales de motivación de cada colaborador y desarrollar todas las formas posibles para desarrollar un sentido de pertenencia que “alimente” al resto del equipo. Felizmente, podemos decir que está comprobado que son cosas muy sencillas las que logran generar este importante objetivo. Desde preocuparse por la persona más allá de la tarea, una felicitación en el momento adecuado, hasta un llamado de atención que permita aprender de un error cometido.

“Saber elegir el mejor camino, y compartirlo”

La capacidad de planificación, está presente en todos los procesos de selección de aquellos puestos, donde se requiera trabajo en equipo y concreción de resultados. Saber elegir el mejor camino, implica tener una clara visión de la meta, pero también de los recursos. Del estado deseado, así como de la situación actual.

Podemos colocar a personas valiosas en sistemas y procesos pobres, y pueden fracasar.  Podemos “no ver” un proceso; vemos a las personas que usan el proceso, y es más fácil culpar a un “mal trabajador” que al sistema en el que éste se desenvuelve. Los estudios demuestran que hasta un 95% de todos los problemas en una organización se originan de los sistemas, procesos y procedimientos, no de las personas que realizan el trabajo.  Los líderes deben demostrar la habilidad de planificar, innovar, definir objetivos claros de desempeño, delegar, usar el tiempo efectivamente, analizar problemas, y tomar decisiones.  La clave está en identificar las herramientas necesarias para involucrar las personas a los procesos. Los líderes saben que la gente apoya un mundo que ayudaron a crear.

“El respeto se gana con responsabilidad”

Un buen líder genera un sentimiento de compromiso hacia la tarea y el equipo a través del ejemplo. La responsabilidad es la llave para conseguir ese respeto y esa adhesión por parte de sus colaboradores. No alcanza con dar órdenes. Esas directivas deben ser auténticas y coincidentes con una conducta. La disciplina es otro de los componentes que un buen líder debe transmitir en sus colaboradores. Cuando el mensaje es coincidente con un estilo de trabajo y de personalidad, se producen efectos mucho más impactantes sobre los destinatarios. 

En resumen, si bien no hay una receta para convertir a un “mal jefe” en “buen jefe”, podemos encontrar determinadas características similares en aquellas personas que conducen equipos exitosos. La responsabilidad, la capacidad de planificar, el respeto por las personas, las habilidades de comunicación y la empatía son algunos de esos elementos que no pueden faltar en una figura de liderazgo. Sin embargo, estos no son elementos que se compran en el supermercado. Deben salir desde adentro, como un sentimiento que determina una conducta.

Por Martín Frías, coordinador de marketing de Bumeran.com

martes, 8 de enero de 2013

La Credibilidad del Vendedor



Uno de los grandes desafíos que enfrenta cualquier vendedor es establecer su credibilidad con un nuevo cliente. Si un cliente no sabe de usted o de su empresa, debe ser convencido de tres cosas muy importantes:

1) Hacer un cambio de su proveedor actual por usted debe ser digno de la molestia que implica.

2) Su propuesta debe satisfacer las necesidades de la empresa y ofrecer beneficios tangibles que justifiquen cambiar el status quo.

3) Tener la seguridad que usted y su empresa pueden proporcionar el apoyo que el cliente requiere para implementar el cambio.


No se equivoque, la mayoría de la gente no le gusta el cambio. De hecho, hasta que un cliente esté convencido de que los beneficios de hacer un cambio es mayor que los problemas asociados con él, la venta no va a suceder.

Por otro lado, no es raro encontrar un cliente que quiere cambiar de proveedor y usted se encontrará compitiendo con varios competidores por el negocio. En este caso, el vendedor que pueda crear la mejor "imagen de credibilidad" es el que obtendrá el negocio con esa empresa. Esto significa que el cliente debe ser convencido de que la solución que le proporciona es la mejor y que usted es el vendedor que la llevará a cabo con mayor eficacia para ellos.

Tres claves para lograr credibilidad

Una vez que entienda que la credibilidad es uno de sus objetivos principales de ventas, puede crear una estrategia diseñada para hacer exactamente eso. Aquí hay tres componentes clave para crear la credibilidad con su cliente:

1. Evite las ventas "estereotipo". Las primeras impresiones son absolutamente críticas, y muchos vendedores cavan su propio agujero con errores estúpidos antes de que incluso tener la oportunidad de demostrar el valor de sus productos / servicios. Recuerde estos puntos críticos:

En primer lugar, nunca deje de ser amable y profesional. Mírese a sí mismo. ¿Suena como un profesional? Trate a todos con respeto y evite hacer suposiciones potencialmente perjudiciales sobre los roles, responsabilidades, que podrían influir en una venta.

En segundo lugar, pase la mayor parte de su tiempo escuchando en vez de hablar. Muchos vendedores pierden credibilidad porque quieren "vender, vender, vender" antes de entender los problemas. Cometer este error es perder su credibilidad y…la venta.

En tercer lugar, no hable mal del actual proveedor del cliente. Criticar a la competencia es miope, amateur, y muy perjudicial para su propia credibilidad. Un comprador astuto a veces pone esta trampa mencionando su descontento con su proveedor actual para ver cómo responde usted.

El profesionalismo construye credibilidad.


2. Los vendedores tienden a iniciar conversaciones de ventas diciéndole al cliente que tan buenos e importantes son.

"Tenemos la mejor calidad."

"Nuestro servicio es el mejor de la industria".

“Somos los más grandes ... los mejores ... los más rápidos ..."


Sí, lo que sea!! El problema es que cada representante de ventas está diciendo exactamente lo mismo, y los clientes están cansados de oír estas cosas todo el día. Cuando haya terminado de hablar sobre lo genial que usted es, no ha hecho otra cosa que afectar su credibilidad. En vez de generalidades hable de cosas específicas. ¿Por qué un cliente debe comprarle a usted? ¿Qué hace usted que lo hace único? ¿Qué diferencia a su empresa de la competencia?

Si usted ha hecho su tarea y entiende el negocio del cliente, se hace mucho más fácil de personalizar sus ventajas competitivas a la situación del cliente. Teniendo este enfoque, su credibilidad aumenta, ya que se centra en el cliente.

La diferenciación se basa en la credibilidad.


3. El uso de "terceros" es una prueba para poner en marcha su credibilidad.

Una vez más, si usted ha hecho su tarea, usted puede traer ejemplos específicos a sus reuniones de ventas. Si usted es un vendedor nuevo, o un veterano de veinte años de trabajo con un nuevo cliente, una manera comprobada para establecer la credibilidad es el éxito que ha tenido con otros clientes.

Describir la aplicación con éxito de su producto / servicio con otros clientes en situaciones similares pondrá a su cliente en los zapatos de los otros clientes y ayudarles a ver las posibilidades de cómo su producto o servicio puede aplicarse exitosamente en su propia situación. También de esta manera subliminalmente comunica su competencia y sus credenciales, y la eliminación de algunas de las barreras psicológicas para tomar una decisión de compra a su favor.

Los éxitos en el pasado construyen credibilidad.


Recuerde, los clientes compran a los vendedores que les gustan y les dan confianza. A pesar que la confianza duradera se desarrolla con el tiempo, estos tres pasos acelerarán el proceso de creación de la credibilidad con sus clientes potenciales.